Después de divorciarse, la bella Carly Norris (Sharon Stone) se traslada a vivir a un lujoso edificio de la zona alta de Nueva York, donde se han producido varios accidentes mortales y rodeados de misterio. Entre los vecinos de Carly están Zeke (William Baldwin), un atractivo soltero, y Jack (Tom Berenger), escritor de best sellers sobre crímenes reales que vive obsesionado con las faldas y los incidentes acaecidos en el edificio.